Argumentario 44
De 5 millones doscientos mil votos a 8 millones doscientos mil votos. Tres millones de votos más en una sola legislatura después de la refundación del PP.
Entre los años 89 y 93.
Fue después, en el 96, hace hoy 25 años, cuando se producía la primera victoria electoral del centro derecha, con 9 millones setecientos mil electores. El espacio político quedó consolidado.
El centro derecha con sus mismos votos tuvo victorias y derrotas, dos mayorías absolutas, pero siempre mantuvo fortaleza en el Congreso y presencia territorial inmensamente importante.
Fue en el año 2015, cuando aún ganando el PP, comenzó la pérdida de escaños por la irrupción de Cs.
Se perdieron entre ambos 23 escaños pese a sumar juntos los mismos votos que en la mayoría absoluta de 2011; 7 y 3 millones respectivamente, pero solo sumaron 163 escaños, desde los 186 de cuatro años antes.
Las siguientes elecciones, en 2016, fueron las de la moción de censura y las de la ya caída de Cs en representación parlamentaria.
Las últimas, las de noviembre de 2019 supusieron la fuerte entrada de Vox en el
Parlamento. Tercer partido en el escenario electoral del centro derecha español.
Con 10 millones cuatrocientos mil votos en la suma del PP, VOX Y CS, solo 151 escaños.
Con los mismos votos que en la mayoría absoluta del
PP en 2011, 35 escaños menos, con el resultado conocido, el gobierno social-comunista de Sánchez e Iglesias.
Fraga refundó el centro derecha y Aznar lo llevó a la victoria electoral de marzo de 1996.
Rajoy obtuvo la última mayoría absoluta en 2011, hace solo 10 años.
El cambio de paradigma fue la división en dos partidos primero, y en tres ahora de todo un mismo espacio que desde el año 93 votó a las mismas siglas.
No ha habido transferencia de voto derecha izquierda, ni los votantes de centro derecha han optado por la abstención.
Lo único relevante y determinante es que en un sistema electoral de circunscripciones dispares en número de escaños, y con un sistema de proporcionalidad la división castiga el resultado.
En Madrid se eligen 37 diputados, 102.222 votos por escaño, mientras que los 79.427 votantes de Teruel eligen a 3 diputados, 26.027 votos por escaño.
Esta disparidad hace que haya proporción en unas cuantas provincias y en más de la mitad de las provincias de España el castigo a la multiplicidad de partidos sea severo.
El sistema es complejo. Pero es nuestro sistema electoral, y ha funcionado durante 40 años dando mayorías y alternancia. Gobernando unos y otros.
La única manera de ganar es unirse todos bajo unas mismas siglas. Solo la unión da victorias electorales. Solo la unión neutraliza el peso de los diputados de partidos nacionalistas o independentistas.
La aritmética es tozuda, pero simple. Sumar es ganar, dividir es perder.