Argumentario 160
Sánchez no ha conseguido nada.
Todo ha sido un empeño de Charles Michel y el Consejo Europeo por el futuro de la Unión y, un forcejeo entre Francia y Alemania con Holanda y Austria.
Ni la cantidad, ni el Sistema de Devolución, ni las condiciones de utilización de los fondos europeos tienen que ver con el modelo que Sánchez propugnaba.
España en 35 años en la Unión Europea nunca había dado una imagen tan débil y patética.
Hemos llegado a la negociación económicamente asfixiados, políticamente arruinados y con el peor balance de fallecidos por la pandemia de todos los socios comunitarios.
Ahora Europa, la oposición política y la sociedad española han de estar vigilantes para que el dinero que se transfiera sirva al interés general de España.
Los 140.000 millones de euros deben ser el estímulo necesario para la reactivación económica.
La mala utilización o la mala gestión podrían ser la ruina definitiva de nuestro país.
Modernización de la economía, mejora de las infraestructuras, la apuesta por las energías renovables, recortar el desfase tecnológico y de competitividad con los países más dinámicos.
La gran Paradoja de España: un gobierno socialcomunista para aplicar propuestas liberales.Los planes de inversión y las reformas serán evaluados por la Comisión y aprobados por el Consejo.
El futuro de España está en la calidad de sus propuestas, en el Freno de Emergencia y en las reformas estructurales. Todo ello activado por quienes realmente han negociado y acordado el futuro de la Unión.
Francia, Alemania, Holanda y Austria son los nuevos protagonistas de la próxima década.
El aplauso a Sánchez de su gobierno es el último lamento de una coalición gubernamental esperpéntica.
El peligro es que los comunistas del gobierno desarrollen su plan ideológico a cambio del apoyo a los presupuestos que obtengan el visto bueno de las instituciones europeas.