Argumentario 63
500 mil parados y 100 mil trabajadores en ERTE.
El 20% de las mujeres y el 40% de los jóvenes que quieren trabajar no encuentran trabajo.
10 mil millones de € de déficit presupuestario desde que gobiernan Puig y Oltra, 50 mil millones de deuda pública y 42 mil millones de deuda con el Estado. Suma y sigue.
La deuda en relación al Producto Interior Bruto se ha duplicado en 10 años, del 21,9% de 2011 al 42 % en el año 2020.
En todos los datos estamos en los últimos lugares entre autonomías; la segunda comunidad donde más sube el paro, la comunidad que mayor déficit presupuestario tiene en el último ejercicio y la que más va a seguir endeudándose con el Estado, a esto se le añade que somos la segunda comunidad en volumen de deuda total.
Y además, hemos caído en inversión productiva, los gastos corrientes están sobrepasados y no se conocen proyectos de estímulo a la economía ni a la apuesta por infraestructuras o equipamientos.
El gobierno de la Generalitat Valenciana está descontrolado políticamente, Puig bajo sospecha, Oltra bajo sospecha.
El gobierno de socialistas y compromís ha errado en toda la estrategia contra la pandemia, hospitales de campaña que nunca se abrieron para el fin que se montaron, falta de material, y ahora sin calendario cierto y conocido de vacunación. Las decisiones que han ido adoptando de cierres perimetrales o de horarios, han sido cambiantes, asfixiantes y caprichosas.
Además, Puig por propio interés partidista cambió la fecha de las elecciones autonómicas dejando la legislatura al capricho de la coyuntura, lo que genera más incertidumbre.
No hay liderazgo, las decisiones se adaptan a la necesidad propagandística y al acomodo de la bicefalia gobernante.
Y para culminar todo el panorama el conseller de Educación atacando la educación concertada, el 30% de la escolarización y apretando con ínfulas catalanistas superadas que solo generan crispación y división en la comunidad educativa y, la conselleria de sanidad confiscando hospitales que funcionaban cargando sobre los presupuestos decenas de millones de euros por culpa de la subsiguiente ineficaz gestión sanitaria.
Paro, despilfarro y descontrol después de 6 años de una coalición política que dijo venir a ser transparente y es la más opaca y huidiza de la democracia autonómica.
Puig y Oltra han sido incapaces de explicarle a los valencianos para que están gobernando, para quien trabajan y qué ideas y proyectos tienen para el futuro de nuestra comunidad
Triste y preocupante balance, social, económico y político.