Fotografía La Razón
Argumentario 93
La Guardia Civil de nuevo impecable en Ceuta.
Defendiendo las fronteras de España y salvando vidas de quienes son utilizados, bebés, mujeres, niños, jóvenes, como carne de cañón de nuestros tiempos.
Vergonzosa y escandalosa por inhumana y contraviniente con las normas que rigen las naciones en sus relaciones la acción marroquí. Pero reprochable, ideológica y humillante la actuación de la izquierda española desde hace demasiados años con las relaciones con Marruecos, con Estados Unidos, y con las mafias organizadas de trata de seres humanos en su lucrativo negocio de seres humanos de África hacia Europa.
Marruecos es un estado soberano freno de yihadismo y estratégicamente aliado de los Estados Unidos líder indiscutible de las democracias occidentales.
El lamentable discurso disparatado respecto del Magreb y las absurdas relaciones con Norteamérica, desde que Zapatero no rindió cumplido homenaje a la bandera americana y retiró las tropas españolas en Irak por su cuenta y riesgo, hace de la izquierda española un desastre de dimensiones catastróficas en política internacional.
Sánchez y su Gobierno empezaron abrazando a los inmigrantes del Aquarius para luego abandonarlos a su suerte, continuaron con una impostura clásica respecto a los movimientos migratorios y debilitaron la acción de la guardia civil en las fronteras calientes.
Tarajal es producto de todo ello. Sánchez es una calamidad momentánea aunque muy dañina, la Guardia Civil está perenne en la defensa de nuestro territorio y de nuestra seguridad.
Mientras Sánchez sobrevolaba la costa para una nueva foto, los guardias se volvían a jugar la vida allá abajo para mantener la imagen de España y los españoles a la altura que le corresponde a una antigua y gran nación.
La Guardia Civil está siendo la imagen de un estado democrático sin gobierno en situaciones límite. Defender España a la vez que salvar las vidas de quienes han sido lanzados a una ocupación peligrosa e ilegal.
